Canalla
No me pidas que te olvide,
ni me exijas el olvido,
si al cerrar la puerta, canalla,
dejaste el alma conmigo.
La memoria es un verdugo,
que no descansa ni huye,
y repite cada noche
la pena que me destruye.
Camino entre muros ciegos,
buscando un rumbo prohibido,
pero todos los caminos
me llevan a lo que he sido.
Quisiera arrancar tu nombre
del huerto que fue mi pecho,
mas la raíz está hundida
en lo más hondo del mar.
Si el amor fue llama y viento,
el desamor es el frío
que me heló la sangre viva
y apagó mi antiguo valor.
Dices que no soy el mismo,
que he de buscar otro nido;
¿quién le enseña a volar al pájaro
que nace sin haber nacido?
Me condenaste a la sombra
de un sol que no fue jamás,
y yo vivo con el eco
de lo que no volverá.
No pido tregua a mi pena,
pues mi pena es mi destino;
polvo seré y te recuerdo,
en el último camino.
Autor: Santos Rojo ©
Administrador fundador del grupo SRM.
Derecho reservado de autor autor.
Publicada: 25/10/2025
Cáceres (España)
Comentarios
Publicar un comentario